El Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza ha elevado este lunes a más de 23.000 el balance provisional de muertos por la ofensiva militar lanzada por Israel el 7 de octubre, en respuesta a unos atentados perpetrados por Hamás y que dejaron unos 1.200 fallecidos en suelo israelí.
Las autoridades gazatíes han confirmado 249 fallecidos más en las últimas 24 horas, por lo que el dato oficial asciende ya a 23.084. Además, cerca de 59.000 personas han resultado heridos en estos tres últimos meses, que han dejado también una grave crisis humanitaria en el territorio costero.
Más de 1,9 millones de palestinos, equivalente al 85 por ciento de la población de la Franja, se han visto obligados a abandonar sus hogares, sin que haya perspectivas a corto plazo de al menos un alto el fuego entre las partes. El Gobierno de Benjamin Netanyahu ha advertido de que seguirá con las operaciones hasta erradicar la amenaza de Hamás en Gaza.
La ONU también ha denunciado ataques sobre sus instalaciones. Desde el inicio de los ataques, la agencia para los refugiados palestinos (UNRWA) ha registrado 220 incidentes que afectan a sus complejos, entre ellos 63 ataques directos, según el último informe.