El ministro de Exteriores de Irán, Hosein Amirabdolahian, ha llegado este domingo a la capital de Pakistán, Islamabad, junto a una delegación de alto rango para reunirse con su homólogo paquistaní, Jalil Abbas Jilani, quien le había invitado tras el repunte de las tensiones por bombardeos mutuos contra objetivos «terroristas» en sus respectivos territorios.
Amirabdolahian ha sido recibido en la base aérea de Nur Jan por el secretario de Exteriores de Asia Occidental, Rahim Hayat. El jefe de la diplomacia iraní «mantendrá conversaciones en profundidad» con Jilani y visitará al primer ministro, Anwarul Haq Kakar, según han explicado las autoridades paquistaníes.
«Encantado de recibir al ministro de Exteriores Amirabdolahian en su tercera visita a Pakistán en los últimos años. Con su visita, las relaciones de alto nivel entre dos países hermanos han vuelto a cobrar impulso. Esperamos interacciones productivas y sustantivas», ha manifestado Hayat en su perfil de la red social X.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores iraní ha indicado que la delegación intercambiará opiniones sobre el fortalecimiento de la cooperación en materia comercial, industrial, científico, académico, de seguridad y energético.
Jilani invitó al ministro iraní la semana pasada, cuando ambos gobiernos acordaron el retorno de sus embajadores a sus respectivos puestos, mientras que Teherán destacó que los lazos eran «sólidos» y «amistosos», describiendo el terrorismo como «una amenaza común» para ambos e insistiendo en la necesidad de aplicar acuerdos bilaterales.
La Guardia Revolucionaria de Irán llevó a cabo ataques la semana pasada contra «terroristas» del grupo armado Jaish al-Adl en territorio paquistaní, tras lo que Islamabad denunció la muerte de dos niños y la llamada a consultas de su embajador ante lo que describió como una «violación flagrante de su soberanía». Islamabad afirmó además que el embajador de Irán, que se encontraba entonces en Teherán, no tendría permiso para volver al país «por ahora».
Apenas un día después, el Ejército paquistaní ejecutó bombardeos contra territorio iraní alegando que su objetivo eran miembros de los grupos armados Ejército de Liberación Baluche (BLA) y el Frente de Liberación de Baluchistán (BLF). Teherán afirmó que los ataques habían dejado nueve muertos y convocó al encargado de negocios paquistaní para que «diera explicaciones».
Este mismo fin de semana, hombres armados mataron a tiros a nueve paquistaníes en un momento en el que Irán y Pakistán están recuperando sus relaciones, suceso que ha recibido la condena de por parte de Jilani, que ha considerado que lo ocurrido es un «intento de arruinar las relaciones paquitaníes-iraníes».