El secretario general de la ONU, António Guterres, ha reiterado este martes su posición de alto el fuego en la Franja de Gaza tras el veto de Estados Unidos a una nueva resolución en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que pedía el fin de las hostilidades en el enclave y que ha sido condenado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que afirma que esta posición «aumenta el sufrimiento» de palestinos.
El portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, que ha destacado que «no es la primera vez que vemos un veto en el Consejo de Seguridad», ha declarado que «el secretario general sigue esperando que el Consejo de Seguridad encuentre una manera de hablar con una sola voz sobre esta cuestión».
«(Guterres) sigue defendiendo e impulsando su objetivo en sus reuniones con los responsables políticos que tiene a puerta cerrada y en gran medida en público y con su equipo sobre el terreno, que abogan por lo mismo», ha agregado al ser preguntado durante una rueda de prensa sobre el papel del jefe de la ONU.
Asimismo, ha remarcado que cada miembro permanente del organismo que veta una resolución tiene el deber de explicar ante la Asamblea General su posición: «Los cinco países que tienen el veto tienen una gran responsabilidad y creo que es necesario explicar cómo se utiliza el veto», ha manifestado.
Por otro lado, al reaccionar a las declaraciones del representante israelí ante la ONU, Gilad Erdan, sobre que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) es una «organización terrorista», ha afirmado que «este tipo de declaraciones incendiarias no ayudan al trabajo humanitario que se trata de realizar en Gaza y otras partes de Oriente Próximo».
«La UNRWA sigue siendo y es la columna vertebral del trabajo humanitario que se están realizando en Gaza con un gran costo para el propio personal. Sigue siendo la columna vertebral no sólo de la labor humanitaria, sino también de desarrollo, socioeconómica y educativa para los refugiados palestinos en el Líbano, Siria, Jordania y la Cisjordania ocupada», ha reiterado.
Es por eso que ha pedido mayores contribuciones a sus donantes y ha mostrado su «preocupación» por la eventual retirada permanente de la financiación estadounidense, que ha sido el principal donante a la agencia. «Esperamos que los países que disponen de recursos y que no han sido tan generosos con la UNRWA en el pasado compensen la diferencia», ha concluido.