Los cuatro directores, que están en la ‘shortlist’ de los Oscar, han coincidido en que en España «hay un nivel muy alto» de dirección.
Los cuatros directores de cortometrajes españoles, que optan a entrar el próximo 24 de enero a las nominaciones de los Oscar a mejor corto de ficción, han lamentado que la comedia sea un género «denostado» en España, donde «se aprecia más el arte en género más dramáticos», según la directora de ‘Tula’, Beatriz de Silva.
«Es muy triste que hacer reir a la gente se trate como un género de menor calidad. Es una pena, quizá en América este complejo no está tan desarrollado y por eso estamos donde estamos», ha asegurado, en una charla que ha tenido lugar este martes en la Academia del Cine, en la que también han participado José Pozo, director del corto ‘Plastic Killer’, Álvaro Carmona de ‘El tratamiento’ y Santiago Requejo por ‘Votamos’.
Al respecto, Requejo, que ha tildado su corto de ser «un drama con tintes de comedia», ha reconocido que la actualidad marca que «la gente busque reírse» y ha elogiado que los cuatro títulos «tienen esos momentos de liberación».
Sin embargo, Álvaro Carmona no ha compartido que la comedia esté «denostada» en España y ha defendido que estos cortos han triunfado porque «son comedias que plantean temas que son interesantes». «La comedia moderna no solo se basa en hacer reir. Creo que los géneros se van fundiendo unos con otros», ha subrayado.
Esta afirmación ha sido compartida por José Pozo, que también ha destacado la fusión de géneros y el buen papel de los actores. «No hacemos la comedia fácil. Son interpretaciones series, con personajes que actúan de una manera concreta y que lo que ocurre a su alrededor es gracioso», ha afirmado.
Además, los cuatro directores han celebrado que la industria americana «no se deje influir por el origen de los proyectos», como refleja que cuatro de los 15 cortos preseleccionados sean españoles. «Creo que desde hace mucho tiempo a los directores españoles se les valora mucho en Estados Unidos», ha asegurado José Pozo, que ha apostillado que «esto pasa porque hay un nivel muy alto».
Para Beatriz de Silva esto ocurre porque «hay más cantidad de producciones», por lo que «hay más probabilidad que hayan ideas buenas», aunque en su caso, ha puntualizado que es necesario que haya más referentes, especialmente mujeres, en el género.
«Es importante tener referentes, anteriormente hemos visto a directores como Borja Cobeaga, Javier Fesser o Rodrigo Sorogoyen que han llegado lejos y a la gente que viene por detrás te permite soñar alto», ha recalcado.
PRONÓSTICOS
Por otro lado, Álvaro Carmona, que no se ha atrevido a hacer un pronóstico sobre el ganador a mejor corto en los Oscar, ha señalado que 2022 ha sido «el mejor año del cine español» y ha advertido que en el futuro la industria se dará cuenta de la importancia de este último año. «Cuando se mire atrás, quizá nos damos cuenta de que 2022 ha sido un cambio de paradigma», ha afirmado.
Santiago Requejo ha sentenciado que, entre los cinco finalistas, «tiene que haber representación española» y José Pozo ha sostenido que estará encantado de que cualquiera de sus compañeros sea finalista y ha dejado claro que no compiten entre ellos, una idea compartida por Beatriz de Silva. «Hay muchos países y se compite contra todo el mundo», ha señalado.
Por último, han aconsejado que los cortometrajes deberían tener una mayor promoción y visibilidad en España, y más después de que la gente consuma videos cortos, según Álvaro Carmona, y han considerado que es un tipo de cine que gusta a la gente, como se demuestra en los festivales de cine.
«Yo he visto salas, con aforo para 300 o 400 personas, y estaban llenas para ver cortos. Falta esa apuesta de distribuidoras y de la industria para acercarlo al público», ha concluido Requejo.
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