El Gobierno de Estados Unidos ha afirmado este jueves que Rusia «siembra caos e inestabilidad» con su presencia en África, después de que en los últimos días las autoridades nigerinas y malienses hayan roto relaciones diplomáticas con Ucrania, por las acusaciones sobre la colaboración de Kiev con los rebeldes tuareg en el norte de Malí.
«Hemos visto una presencia desestabilizadora por parte de Rusia. Hemos visto una presencia desestabilizadora por parte del Grupo Wagner en los últimos dos años. Lo que hemos observado es que cada vez que Wagner llega, cada vez que Rusia llega a África Occidental, como ocurre en todo el mundo, los vemos sembrar el caos e inestabilidad a su paso», ha declarado el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en una rueda de prensa.
Además, ha alentado a estos países a abogar por la diplomacia. «Siempre creemos que las relaciones diplomáticas son importantes y que es bueno que los países hablen entre sí y tengan la capacidad de resolver las disputas y los problemas que tengan, y por eso la diplomacia es importante», ha remarcado.
La junta militar de Malí anunció el domingo la ruptura de sus relaciones bilaterales con Ucrania después de que el portavoz del servicio militar de Inteligencia ucraniano, Andrei Yusov, sugiriera durante una emisión en un canal de televisión local que sus servicios estaban colaborando con los rebeldes, que recientemente protagonizaron uno de los episodios más sangrientos del conflicto al matar a 47 militares y 84 mercenarios del grupo ruso Wagner.
Tras esta medida, Níger cortó relaciones diplomáticas con Ucrania «en total solidaridad con el gobierno y el pueblo de Malí», debido al apoyo de Kiev «a organizaciones terroristas», acciones que calificó de «subversivas e inaceptables». Malí, Níger y Burkina Faso, los tres gobernados por juntas militares y que han llevado a cabo un acercamiento al Kremlin, se han aliado a través de la creación de la Confederación de Estados del Sahel (AES) para aumentar la cooperación en materia de lucha antiterrorista.