La Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS), la Misión de la Unión Africana en el país (AMISS) y la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo (IGAD) han mostrado este jueves su preocupación por el anuncio de la segunda extensión del periodo de transición abierto tras la firma del acuerdo de paz de 2018 entre el presidente del país, Salva Kiir, y el principal líder rebelde y vicepresidente, Riek Machar.
«Observamos con preocupación que ha sido necesario prorrogar el período de transición del Acuerdo Revitalizado para la Solución del Conflicto en la República de Sudán del Sur (R-ARCSS) por segunda vez debido a que no se han aplicado los puntos de referencia críticos pendientes. Lamentablemente, ninguna de estas prórrogas, desde que se firmó el R-ARCSS el 12 de septiembre de 2018, ha ayudado a lograr sus objetivos», reza un comunicado conjunto.
En ese sentido, han tomado nota del anuncio de la prórroga y han instado a dar un «nuevo impulso» con el objetivo de cumplir con los «compromisos» con la población sursudanesa.
A pesar de ello, han reconocido que esta decisión ha sido alcanzada a través del «diálogo y del consenso», por lo que han mostrado su esperanza de que los actores políticos continúan con el «mismo enfoque» de cara a culminar la transición y que el pueblo pueda elegir a sus propios líderes.
«Es imperativo que los líderes de Sudán del Sur pongan en primer lugar los intereses de la nación y su pueblo; reconstruyan la confianza pública; involucren y den cabida a todas las voces y puntos de vista, incluidas las partes no signatarias que siguen participando en la Iniciativa Tumaini, con miras a romper el ciclo perpetuo de transiciones en Sudán del Sur y allanar el camino hacia una paz inclusiva y sostenible», continúa la misiva.
Los tres organismos han resaltado también la importancia de que el Gobierno de transición establezca mecanismos, garantías y recursos para implementar las «tareas pendientes».
Por último, han subrayado su compromiso para «trabajar juntos» y «apoyar» los esfuerzos para evitar el retorno a la violencia generalizada y para completar un proceso de transición pacífico encaminado hacia una paz «duradera» y una gobernanza «inclusiva» basada en elecciones libres, justas y creíbles».
El ministro del gabinete de Gobierno sursudanés, Martin Elia Lomuro, detalló que la prórroga –que fija los comicios para diciembre de 2026– se produce «en respuesta a las recomendaciones tanto de las instituciones electorales como del sector de seguridad».
Las autoridades sursudanesas, que han asegurado que el Gobierno seguirá funcionando «como de costumbre», ya prorrogaron en agosto de 2022 el periodo de transición y fijaron como fecha para la celebración de elecciones este mes de diciembre, si bien había mucho escepticismo al respecto dadas las enormes dificultades para concretar una paz total con todos los grupos armados de oposición.
Pese al descenso de la violencia por el conflicto político, el país ha registrado un aumento de los enfrentamientos intercomunitarios, motivados principalmente por el robo de ganado y las disputas entre pastores y agricultores en las zonas más fértiles del país, especialmente a causa del aumento de la desertificación y el desplazamiento de poblaciones.