Las autoridades de Somalia han anunciado este jueves la muerte de 41 combatientes del grupo Al Shabaab en dos ataques llevados a cabo por las Fuerzas Armadas en Bos-Hareeri, en Shabelle Medio, y en Jambalul, en la región Shabelle Bajo.
La Agencia de Inteligencia y Seguridad Nacional (NISA, por sus siglas en inglés), que ha colaborado con el Ejército en sus operaciones, ha informado de que 29 miembros del grupo han sido «asesinados» en Bos Hareeri, una localidad ubicada en la región de Shabelle Medio, en el sur del país africano.
Además, las tropas somalíes han atacado en los alrededores de Jambalul, en Shabelle Bajo, donde doce de sus milicianos han fallecido. El Ejército bombardeó en la víspera este municipio, matando a dos líderes del grupo islamista identificados como Farhán Osman Hasán y Ahmed Gumar. Según la agencia estatal de noticias SONNA, estos desempeñaban las funciones de jefe de operaciones con explosivos y responsable de finanzas del grupo respectivamente en Shabelle Bajo.
El ministro de Defensa de Somalia, Abdulqadir Mohamed Nur, ha confirmado este mismo jueves que más de 150 combatientes de Al Shabaab han muerto en ataques aéreos selectivos realizados durante las últimas 48 horas. En declaraciones a la prensa nacional, ha celebrado que las operaciones han mermado gravemente la capacidad del grupo terrorista en la región.
Somalia ha incrementado en los últimos meses las ofensivas contra Al Shabaab con apoyo de clanes y milicias locales como parte de una serie de decisiones adoptadas por el presidente, Hasán Sheij Mohamud, quien prometió al asumir el cargo en mayo de 2022 poner la lucha antiterrorista en el centro de sus esfuerzos para estabilizar el país africano.