Cada vez más personas deciden recurrir a soluciones naturales para combatir los trastornos de ansiedad e insomnio y recuperar el equilibro en su día a día. Uno de los ingredientes que ha ganado protagonismo en los últimos años es la ashwagandha: una planta adaptógena que se utiliza desde hace siglos por su capacidad para ayudar al organismo a resistir el estrés físico y emocional.
Ester González, nutricionista del departamento técnico de Laboratorios Niam asegura que la ashwagandha «se ha posicionado tan bien» ante la demanda de esas personas que preguntan alternativas naturales que les ayude con el estrés, el insomnio o la niebla mental porque «cada vez más estudios respaldan su eficacia».
La ashwagandha (Withania somnifera) es una planta originaria de la India que se utiliza desde hace más de 3.000 años en la medicina tradicional. En su raíz se concentran los compuestos activos más relevantes, los withanólidos, que actúan sobre el eje hipotalámico-hipofisario-adrenal regulando la respuesta al estrés.