El exministro del Interior gambiano Ousman Sonko ha sido condenado este miércoles a 20 años de cárcel por el Tribunal Penal Federal de Suiza, acusado como estaba de crímenes contra la Humanidad.
Sonko huyó a Suiza en 2016 poco antes de que el expresidente Yahya Jamé se marchara al exilio tras su derrota frente a Adama Barrow en las elecciones de diciembre de ese año, si bien fue arrestado en 2017 después de varias denuncias contra él por estos crímenes en Gambia.
El pliego de cargos de la acusación, que acompaña al veredicto publicado en la web del Tribunal, apunta que Sonko «mató, torturó, violó intencionadamente a personas y las privó ilegalmente de su libertad», desde 2000 a 2016, bajo el dictado del entonces presidente Jamé, y actuando inicialmente en su calidad de miembro del Ejército de la Gambia, luego como Inspector General de la Policía y finalmente como Ministro del Interior.
Concretamente, la acusación señaló a Sonko por el asesinato en enero de 2000 de un soldado implicado en un fallido golpe de Estado y de encarcelar y violar posteriormente a su viuda en repetidas ocasiones hasta 2005. La mujer fue torturada durante su estancia en prisión.
La acusación también ha señalado a Sonko por «haber torturado a varios miembros de la oposición y de haberlos privado ilegalmente de su libertad» además de torturar y asesinar a un organizador de una manifestación opositora.
Sonko es el segundo gambiano juzgado en Europa por crímenes en el país africano, tras el caso en Alemania contra Bai Lowe, exmiembro de una unidad paramilitar conocida como ‘Junglers’, igualmente creada por Jamé. Lowe fue sentenciado a cadena perpetua en noviembre de 2023 por crímenes contra la humanidad.
En su última comparecencia antes del veredicto, Sonko negó todos los cargos y aseguró que el uso de la tortura por parte de personas los Junglers era claramente inaceptable y que las fuerzas policiales bajo su control nunca estuvieron involucradas, recoge la ONG Trial International, que ha seguido el caso. La sentencia, recuerda, puede ser apelada.
Durante los últimos años han salido a la luz numerosos abusos y atrocidades cometidos durante el régimen de Jamé, en el marco de los trabajos de la Comisión para la Verdad, la Reconciliación y las Reparaciones (TRRC).
La TRRC fue creada para responder a las exigencias de los familiares de víctimas de desapariciones y torturas, que exigen justicia una vez ha llegado a su fin el régimen de Jamé, quien accedió al poder en 1994 tras un golpe de Estado y quien está exiliado en Guinea Ecuatorial desde enero de 2017.
Jamé accedió a entregar el cargo al actual presidente, Adama Barrow, vencedor de las elecciones presidenciales celebradas en diciembre 2016, si bien para ello fue necesario que la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) ejerciera de mediador e incluso amenazara con una intervención militar si no aceptaba su derrota.