El Ejército de Corea del Sur ha denunciado este lunes el disparo de «múltiples misiles balísticos» hacia el mar Amarillo por parte de Corea del Norte, en el primer lanzamiento de este tipo desde la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca y después de que Seúl y Washington iniciaran sus maniobras militares conjuntas anuales, criticadas por Pyongyang.
El Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano ha indicado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Facebook que «Corea del Norte ha disparado en torno a las 13.50 horas (hora local) múltiples misiles balísticos no identificados desde la provincia de Hwanghae hacia el mar Amarillo», sin especificar si el disparo ha tenido lugar desde Hwanghae Norte o desde Hwanghae Sur.
«Nuestro Ejército mantiene una postura de total preparación, al tiempo que refuerza la supervisión y la vigilancia y en el marco de una cooperación cercana con Estados Unidos», ha manifestado, tras el lanzamiento de las maniobras ‘Escudo de la Libertad’, que se extenderán durante once días.
Poco antes de los lanzamientos, el Ministerio de Exteriores norcoreano había calificado las maniobras como un «peligroso acto de provocación», al tiempo que alertó de que «podría provocar un conflicto físico entre las dos partes por medio de un solo disparo accidental» y denunció que ambos países buscaban llevar la situación «a un punto extremo».
En este sentido, ha denunciado que «el rugido de la maquinaria bélica, lleno de hostilidad y desconfianza, se escucha desde la zona fronteriza» y ha lamentado que el posicionamiento de Estados Unidos, centrado en «sanciones, presión y confrontación», no ha cambiado a pesar del cambio de Administración con la llegada de Trump a la Casa Blanca.