Los Mossos d’Esquadra y la policía de Marsella han detenido a 14 miembros de una mafia marsellana -seis hombres y ocho mujeres de entre 19 y 55 años– por presuntamente matar a dos hombres delante de un hotel en Salou (Tarragona) el 3 de mayo.
Así lo ha explicado en una rueda de prensa este lunes el fiscal del Tribunal Judicial de Marsella, Nicolas Bessone, junto al jefe de la Oficina Central de Lucha contra el Crimen Organizado, Yann Sourisseau; el oficial de policía de Marsella Pascal Bonnet y el subjefe de la Comisaría Central de Investigación Criminal de los Mossos d’Esquadra, Joan Carles Granja.
Bessone ha relatado que una de las dos víctimas murió en el interior de su vehículo, mientras que la segunda víctima fue trasladada hasta un centro hospitalario después de recibir varios disparos a pocos metros del vehículo del que salió para huir de los agresores.
Los delincuentes «huyeron en coche después del ataque», y los Mossos d’Esquadra y la Policía Local de Salou activaron un dispositivo policial para localizar el coche en el que habían huido y lo encontraron en un área de descanso de la autopista AP-7 en dirección Francia.
Además, los agentes detuvieron a un miembro del grupo que acababa de calar fuego al vehículo, que constaba como robado en Marsella, y en su interior localizaron dos armas de fuego cortas, un arma de guerra larga y dos granadas.
INVESTIGACIÓN
La División de Investigación Criminal (DIC) de la Región Policial de Tarragona de la policía catalana se hizo cargo de la investigación, que dirigió el Juzgado de Instrucción 6 de Tarragona, y comprobó que en el doble asesinato había personas vinculadas con el crimen organizado en Marsella.
La policía catalana contactó con los oficiales de enlace franceses en Catalunya para compartir información, y el 26 de julio se firmó un acuerdo de colaboración entre la Fiscalía francesa y el juez de Tarragona para crear un equipo conjunto de investigación entre los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional Francesa, con el apoyo de la Guardia Civil de Catalunya.
La investigación duró unos ocho meses, y los agentes localizaron a cuatro miembros -que fueron detenidos posteriormente en Francia– y acreditaron que algunos de ellos también habían viajado a España en el momento de los hechos para localizar a las víctimas.
CUATRO EN LIBERTAD VIGILADA
El fiscal ha explicado que el 15 de enero se detuvo a los 14 miembros, cuatro de ellos «considerados como los cabecillas»; algunos de ellos ya habían ingresado en prisiones francesas por otras causas, y cuatro quedaron en libertad bajo vigilancia a la espera de juicio.
Los jueces de los juzgados de Tarragona y de Marsella decidirán dónde se celebrarán los juicios de los detenidos, ya que algunos de ellos fueron arrestados en territorio español.
Bessone ha destacado la feminización de las organizaciones criminales: «Esto es algo nuevo porque ahora las mujeres desempeñan papeles importantes en las organizaciones».
«Estos crímenes entre mafias eran locales de la región, pero ahora se puede ver que es un fenómeno nuevo porque las bandas criminales cruzan las fronteras y van al extranjero a matar. Es algo nuevo que hay que tomar medidas», ha añadido el fiscal, que ha detallado que desde octubre hay tres asesinatos por semana.
Por su parte, Sourisseau ha agradecido el trabajo de los Mossos d’Esquadra, ya que la «rápida intervención e investigación de ellos permitió identificar a los agresores y poder transferirlos a Francia».
Además, Pascal ha detallado que durante el año pasado hubo 73 «matanzas en Marsella», el 70% de los detenidos fueron miembros de bandas criminales.
MOSSOS D’ESQUADRA
El intendente Granja ha remarcado que el doble asesinato en Salou se perpetró en «tan solo 90 segundos», mientras las víctimas estaban mirando un partido de fútbol en el móvil desde su coche.
«Una de las víctimas estaba huyendo de la justicia francesa, llevaba escondido desde los últimos meses, y las víctimas quedaron sin saber la sorpresa que tenían preparada», ha explicado.
El intendente ha añadido que había una tercera persona en el coche cuando los dispararon, que supuestamente traicionó a las víctimas y avisó a los agresores para que los encontraran, y después del tiroteo se refugió en el hotel, aunque acabó detenida.
«Los analistas refieren que Catalunya es una zona de refugio para el sur de Francia. Esta zona de refugio no es solo de la justicia, sino que también sirve de refugio para otras bandas criminales. En este caso, Salou fue un momento oportuno, por la vulnerabilidad de las víctimas que se encontraban fuera de su entorno de seguridad», ha zanjado.