El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha autorizado este lunes la creación de una mesa de diálogos con el grupo guerrillero Frente Comuneros del Sur, que en mayo se separó del Ejército de Liberación Nacional (ELN) tras tomar la decisión de adherirse a las conversaciones de paz en vez de seguir la directriz general del grupo de congelar las mismas.
«La mesa de diálogos de paz estará dirigida a obtener soluciones al conflicto armado, lograr la efectiva aplicación del Derecho Internacional Humanitario, el respeto de los Derechos Humanos, el cese de hostilidades y afectaciones a la población civil, y el pacto de acuerdos de paz tendientes a facilitar el desarme, la desmovilización y el tránsito a la paz del grupo armado en mención», ha publicado la Consejería Comisionada de Paz en su cuenta de la red social X.
El representante del Gobierno en la mesa será Carlos Augusto Erazo Murcia, quien estará acompañado de Ángela María Robledo Gómez, Andrei Giovani Gómez Suárez y Clemencia Carabalí Rodallega.
Poco después de la ruptura del Frente Comuneros del Sur con el ELN, este último señaló que el Estado colombiano era responsable de crear una falsa disidencia con agentes del servicio secreto infiltrados.
El Gobierno de Colombia mantiene numerosos procesos de paz abiertos que se encuentran en diferentes fases. A pesar de una tregua de más de un año, el ELN y el Ejército han vuelto a los combates. Las diferencias internas de la disidencia del Estado Mayor Central (EMC) de las FARC en las negociaciones ha llevado a una escisión liderada por el líder guerrillero Néstor Vera Fernández, alias ‘Iván Mordisco’, que precisamente es la que sigue luchando contra las Fuerzas Armadas. Recientemente, el Gobierno anunció que retomaba las conversaciones con la disidencia de las FARC Segunda Marquetalia.