El opositor Congreso Nacional para la Libertad (CNL) de Burundi ha denunciado que las elecciones legislativas y locales celebradas este jueves en el país africano han estado «plagadas de irregularidades que desacreditan los resultados» –si bien estos no han sido aún publicados– de una votación en la que el partido en el Gobierno aspira a prorrogar sus dos décadas en el poder.
«CNL constata con pesar que las elecciones del 5 de junio de 2025 están plagadas de numerosas irregularidades que desacreditan los resultados y apela a la responsabilidad de los organizadores», ha señalado el partido en un comunicado difundido en su cuenta de la red social X.
En particular, la formación opositora ha denunciado «la violación del secreto de voto al acompañar a los electores a las cabinas y obligarlos a votar por el partido en el poder», en alusión al Consejo Nacional para la Defensa de la Democracia-Fuerzas para la Defensa de la Democracia (CNDD-FDD).
Asimismo, ha asegurado que, durante los comicios, se ha procedido a «la expulsión y prohibición de acceso de (sus) representantes a las diferentes mesas electorales» y al «encarcelamiento arbitrario de algunos de» ellos; se ha permitido la entrega de «votos múltiples con o sin poder»; se han distribuido «papeletas que contienen el sello del partido en el poder»; mientras que algunos electores han visto «retiradas (sus) tarjetas» censales en los mismos centros de votación.
Al menos dos personas han sido detenidas en los municipios de Vumbi y Kirundo, en el norte de Burundi, acusadas de haber roto tarjetas electorales, según han confirmado las autoridades locales a la agencia de noticias burundesa netpress.
El partido ha pedido la celebración de «libres y creíbles, habida cuenta de los múltiples retos que han marcado la creación de la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI), sus secciones y los colegios electorales». En este sentido, ha apelado al «coraje y la determinación de los burundeses», incidiendo en «su deseo de lograr un cambio positivo en nuestro país».
«Este jueves, los burundeses se han levantado muy temprano por la mañana para ejercer su derecho cívico de elegir a sus representantes en la Asamblea Nacional y en los distintos consejos municipales», ha subrayado el CNL.
El CNDD-FDD, encabezado por Ndayishimiye –presidente de Burundi desde 2020– y en el poder desde hace dos décadas, aspira a prorrogar sus 20 años de gobierno ante la ausencia de una oposición real por la represión de las actividades de los críticos con las autoridades, tal y como han denunciado disidentes y diversas organizaciones no gubernamentales.
Las elecciones tienen lugar también en medio de un contexto de tensiones a nivel de seguridad, especialmente a raíz de los ataques perpetrados durante los últimos meses por el grupo armado RED-Tabara y las acusaciones desde Gitega contra Ruanda por sus supuestos planes para atacar territorio burundés.
Por todo ello, la votación –a la espera de las presidenciales, previstas para 2027– se perfila como una importante cita para determinar el curso político del país africano, especialmente ante las dudas por el creciente deterioro de la situación del espacio democrático y el riesgo de conflicto, dos décadas después del fin de una guerra civil que asoló Burundi.