El Papa ha pedido este jueves durante el ángelus de la fiesta de la Asunción de María un alto el fuego en Gaza, a la vez que ha mostrado su preocupación por la «gravísima situación humanitaria».
En la Plaza de San Pedro, junto a sus fieles, Francisco ha insistido en que es necesario que «se libere a los rehenes» y «se ayude a la población exhausta», después de que 40.000 personas hayan fallecido por la ofensiva militar israelí, iniciada el 7 de octubre como respuesta a los atentados perpetrados por Hamás.
Este jueves se retoman en Doha, Qatar, los contactos para tratar de lograr un alto el fuego en Gaza. «Seguir los caminos de la negociación para que esta tragedia termine pronto. No olvidemos que la guerra es una derrota. Siempre, para todos», ha señalado.
Así, el Papa ha hecho un llamamiento para que «no se amplíen las fronteras del conflicto» y se sigan las vías de la negociación para que «la tragedia llegue pronto a su fin».
Además, Francisco ha lanzado un mensaje de paz para otros conflictos del mundo. «Pienso en particular en la atormentada Ucrania, en Oriente Medio, en Palestina, en Israel, en Sudán y en Myanmar. Que nuestra Madre del Cielo obtenga para todos consuelo y un futuro de serenidad y concordia», ha finalizado.