El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, ha promulgado este miércoles una ley que tiene como objetivo proporcionar cobertura sanitaria universal, medida que ha sido descrita como «un hito en la búsqueda continua» del país «por una sociedad más justa» y que ha tenido lugar apenas dos semanas antes de las elecciones generales.
«También trata sobre eficiencia y calidad. La prestación de asistencia sanitaria en este país está actualmente fragmentada, es insostenible e inaceptable. El Seguro Nacional de Salud (NHI, por sus siglas en inglés) es un instrumento importante para abordar la pobreza», ha declarado.
El mandatario ha sostenido que el NHI hará que la atención sanitaria en el país sea más asequible. «La forma en que se pagarán los servicios sanitarios pretende contener los costes sanitarios integrales y garantizar que los recursos disponibles se utilicen de forma más eficiente», ha explicado, según recoge la agencia de noticias estatal SA News.
Asimismo, ha indicado que el sector público, que atiende a la mayoría de la población, enfrenta limitaciones presupuestarias, mientras que el privado presta servicios a una fracción de la sociedad a un costo mayor sin mejor calidad, por lo que considera que abordar este desequilibrio requiere una «reinvención» de la asignación de los recursos.
No obstante, ha indicado que la «implementación efectiva del NHI depende de la voluntad colectiva del pueblo sudafricano». «Todos debemos abrazar un futuro en el que la atención médica sea un tesoro nacional compartido, que refleje la dignidad y el valor que otorgamos a cada vida sudafricana», ha manifestado.
La norma limitará el papel de los seguros privados, creará un nuevo fondo público para brindar acceso gratuito y establecerá tarifas para la atención médica privada. Los opositores a la medida han apuntado a que el plan agotará las finanzas, limitará las opciones de los pacientes y socavará la calidad.