La Consejería de Medio Rural y Política Agraria ha sometido a información pública las nuevas bases reguladoras de las ayudas a la inversión en explotaciones agrarias, en las que se fijan las distintas modalidades y las condiciones de cada una de ellas. Esta línea, enmarcada en el Plan Estratégico de la Política Agraria Común (PEPAC), exige la aprobación de criterios actualizados.
La resolución, publicada en el Boletín Oficial del Principado de Asturias, incluye como principal novedad que las ayudas para los planes de mejora se dividen en dos líneas, en función de la actuación a la que se dediquen, según ha informado el Principado en nota de prensa.
Por un lado, figuran las actuaciones en explotaciones agrarias para contribuir a la mitigación o adaptación al cambio climático, el uso eficiente de los recursos naturales y el bienestar animal. En este caso, las ayudas podrán alcanzar el 80% de la inversión.
Por otra parte, para las medidas de modernización o mejora de las explotaciones agrarias se establece una ayuda máxima del 65% de la inversión.
En ambos casos la inversión subvencionable será de hasta 200.000 euros por unidad de trabajo agrario, con un importe tope de 800.000 euros por negocio, cuando los titulares sean personas jurídicas, y de 400.000 para el resto.
La tercera línea de subvenciones reguladas en estas bases son las ayudas no productivas en explotaciones agrarias, orientadas a mitigar el impacto del cambio climático, garantizar el uso eficiente de los recursos naturales y proteger la biodiversidad. Como novedad, estas ayudas ampararán no solo las inversiones dirigidas a la protección de ganado y cultivo frente a la fauna salvaje, sino también aquellas destinadas a reforzar la bioseguridad y la sanidad de las explotaciones. Estas ayudas seguirán contando con una financiación del cien por cien de la inversión elegible y un importe máximo de 40.000 euros por explotación.
En las tres líneas se dará prioridad a jóvenes y mujeres y se flexibilizarán los requisitos. Asimismo, se prevé su compatibilidad con las ayudas a la incorporación de personas a la actividad agraria y con las de sucesión en las explotaciones. Estas ayudas también serán compatibles con otros instrumentos financieros, de modo que serán las personas propietarias las que opten por la forma de apoyo que más les interese.
Estas ayudas se enmarcan en la estrategia de favorecer la rentabilidad y profesionalización del sector primario en Asturias, que presta especial atención a aspectos como la eficiencia energética, el bienestar animal y la mejora de la bioseguridad y la sanidad.