El Rey Felipe VI ha ensalzado el «imparable crecimiento» que está experimentando el español a nivel mundial, así como su «pujanza indiscutible» que ha atribuido, entre otros, a su capacidad de evolución y de integrar cambios.

«El imparable crecimiento numérico del español, con ya casi 600 millones de hablantes en todo el mundo, va unido a una diversificación de sus expresiones que lo fortalecen y enriquecen», ha sostenido el monarca con motivo del almuerzo ofrecido en el Palacio Real con motivo de la entrega del Premio Cervantes al escritor Luis Mateo Díez.

Don Felipe ha subrayado que la entrega del Cervantes se ha convertido en la «fiesta» del español «aunque realmente no requiera eso de un día especial porque lo hacemos o deberíamos hacer a diario, al hablar, al leer y al escribir».

Al más de centenar de invitados del mundo de las letras, entre los que había numerosos miembros de la Real Academia Española (RAE), así como escritores y galardonados con distintos premios de literatura en el último año, el Rey les ha dado las gracias por su «contribución al cuidado y progreso» del español.

«Vuestro ingenio e iniciativa son decisivos en este proceso de apertura y transformación de nuestra lengua, que vive un momento fascinante de adaptación a los desafíos que impone el tiempo actual», ha resaltado.

En su opinión, «la pujanza indiscutible del español se ve favorecida por su naturaleza abierta, con un potencial ilimitado para integrar cambios y evolucionar al ritmo que marca el avance social», como lo demuestra «la aparición de nuevos espacios de desarrollo» como los relacionados con la inteligencia artificial o los necesarios para «garantizar la claridad y la accesibilidad de la lengua para todos los ciudadanos».

Por otra parte, el Rey ha vuelto a tener palabras de elogio hacia la trayectoria de Luis Mateo Díez, después de que este recibiera ayer el Cervantes en la tradicional ceremonia en Alcalá de Henares, y le ha felicitado por su nueva novela.

Su escritura, ha dicho Don Felipe, «denota una singularidad y una potencia creadora excepcionales, que han abierto nuevos derroteros literarios y han movilizado conciencias por su profunda reflexión en torno al ser humano».