El Ministerio de Educación de Filipinas ha anunciado este domingo que suspenderá la asistencia a clase durante el lunes y el martes por la ola de calor que está sacudiendo el país y por la huelga que ha declarado el sector del transporte público.
El país, y en general el sureste de Asia, están padeciendo temperaturas con sensaciones térmicas de hasta 45ºC en las grandes ciudades debido a la elevada humedad del ambiente.
La Agencia Meteorológica de Filipinas ha pronosticado que esta situación podría prolongarse incluso hasta mediados de mayo.
En Bangladesh, donde las escuelas y universidades han permanecido cerradas esta semana, las temperaturas en algunas zonas se han disparado por encima de los 42ºC con sensación térmica de 45ºC. India y Birmania también están atravesando las mismas circunstancias.
En Tailandia, la demanda de energía alcanzó un récord de 36.356 megavatios el sábado por la noche, según el Ministerio de Energía y se e espera que las regiones del norte y noreste del país sean las más calurosas, con una máxima de 44 °C registrada en algunas zonas el domingo.
Bangkok emitió advertencias de calor extremo la semana pasada cuando su índice subió a niveles «muy peligrosos». Alrededor de 30 personas han muerto debido a las altas temperaturas este año en Tailandia, en comparación con 37 muertes relacionadas con el calor en todo 2023, según datos del gobierno recogidos por Bloomberg.
A principios de este mes, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia advirtió que más de 243 millones de niños en Asia Oriental y el Pacífico corren el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el calor, potencialmente letales.