El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha celebrado la declaración conjunta de paz firmada este viernes por los líderes de Armenia y Azerbaiyán para poner fin a un histórico conflicto y estabilizar sus relaciones.
Guterres «acoge con satisfacción la exhaustiva» declaración del viernes, firmada por el presidente azerí Ilham Aliyev y el primer ministro Nikol Pashinyan «como un hito importante en la normalización de las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán».
«El Secretario General aplaude el compromiso del presidente Aliyev y el primer ministro Pashinyan con el diálogo sostenido y el fomento de la confianza, y reconoce los esfuerzos del presidente Trump para facilitar el progreso», ha indicado en un comunicado a través de su portavoz, Stéphane Dujarric.
«El Secretario General reafirma el firme apoyo de las Naciones Unidas a todos los esfuerzos para promover una paz duradera en el Cáucaso Sur», ha remachado el comunicado de este sábado.
En términos generales, ambos países se comprometen a «la construcción de buenas relaciones de vecindad sobre la base de la inviolabilidad de las fronteras internacionales y la inadmisibilidad del uso de la fuerza», según el texto de la declaración, pendiente de una ratificación definitiva.
La declaración conjunta del viernes estipula como condición inapelable la consecución de «la conectividad sin obstáculos entre la mayor parte de la República de Azerbaiyán y la República Autónoma de Najicheván a través del territorio de la República de Armenia» a través de este corredor.