El líder de Junts en el Parlament, Albert Batet, ha avisado este miércoles de que su partido se presentó a las elecciones generales «para defender a Cataluña, no para salvar al Estado español y su gobernabilidad», aunque ha señalado que los resultados les dan una posición de fuerza para negociar sobre el conflicto.
Lo ha dicho en su intervención durante la sesión de control en el Parlament al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, al que ha acusado de haber abandonado la mayoría independentista del 52% de la Cámara que permitió su investidura.
«El independentismo ha perdido votos y escaños después de que su partido haya seguido solo una estrategia de alianzas en Madrid, que no ha sido compartido por el conjunto del independentismo», y que provocó la salida de Junts del Govern, ha sostenido.
Batet también ha apuntado a la «españolización» de la campaña por los resultados del independentismo, aunque ha afirmado que las circunstancias les han situado en una posición excepcional y de fuerza para negociar.
«NO HAREMOS JUEGOS EXTRAÑOS»
Ha añadido que es una oportunidad «que Junts no rehuirá para desbloquear el conflicto» entre Cataluña y el resto de España.
«No haremos juegos extraños, a escondidas y contranatura, como el que se ha hecho en el Ayuntamiento de Barcelona», y ha dicho que el resultado de las negociaciones dependerá del presidente del Gobierno y candidato del PSOE, Pedro Sánchez, y de los socialistas.