Un agente de la Policía ha sido detenido este martes tras disparar a quemarropa a un manifestante en la capital de Kenia, Nairobi, en el marco de las protestas que han estallado en el país por la muerte del bloguero Albert Ojwang bajo custodia policial.
El Servicio Nacional de Policía (NPS) ha indicado en un comunicado que un agente que disparó a un hombre cerca de la avenida Moi, ubicada en el distrito comercial de la capital, durante las protestas «ha sido arrestado» y comparecerá ante un tribunal.
Un vídeo no verificado que circula en redes sociales muestra al hombre, un vendedor callejero, forcejeando con dos agentes. Uno de ellos le dispara por la espalda a poca distancia, tras lo que ambos se alejan del lugar rápidamente. Medios kenianos informan de que la víctima –a la que dan por muerta– ha sido trasladada al hospital, si bien las autoridades no han confirmado su estado de salud.
Por otro lado, la Policía ha indicado que han detectado «la presencia de un grupo de matones armados con armas rudimentarias» en el marco de las protestas. «Se han iniciado investigaciones para identificar y procesar a los delincuentes», ha agregado.
La abogada y exministra de Justicia de Kenia, Martha Karua, ha tildado el incidente de «ejecución extrajudicial». «¿Cuántas muertes harán falta para detener esto?», ha subrayado en redes sociales la opositora, elegida por el ex primer ministro Raila Odinga como su compañera de fórmula en las últimas elecciones, celebradas en 2022.
Las fuerzas de seguridad han dispersado a la multitud este martes con gases lacrimógenos en el marco de unas manifestaciones que han estallado para pedir responsabilidades por la muerte de Ojwang, un profesor de secundaria y bloguero que fue arrestado en su domicilio, ubicado en el condado de Homa Bay, el pasado 6 de junio por criticar a un alto cargo policial en redes sociales.
El hombre, de 31 años, murió horas después bajo custodia policial en la sede de la Policía en Nairobi, a 350 kilómetros de su casa. En un primer momento, las autoridades aseguraron que murió tras golpearse la cabeza en una de las paredes de la prisión, si bien la autopsia determinó que tenía lesiones por todo el cuerpo.
El inspector general adjunto de la Policía, Eliud Lagat –a quien Ojwang presuntamente criticó en redes sociales– se ha retirado temporalmente del cargo. Varias personas han sido detenidas en el marco del caso, si bien la investigación continúa.
La ONG Amnistía Internacional (AI) ha instado a llevar a cabo una investigación «urgente, exhaustiva e independiente» para esclarecer los hechos». «Las conclusiones de estas investigaciones deben hacerse públicas, y cualquier agente responsable debe rendir cuentas plenamente conforme a la ley», resaltó.