La guerrilla colombiana Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha anunciado la apertura de un «corredor humanitario» para facilitar la evacuación de civiles atrapados por el ‘paro armado’ en el departamento de Chocó, después de que al varias personas hayan fallecido por no recibir a tiempo asistencia médica.
Las autoridades estiman que al menos 50.000 personas han quedado confinadas por las restricciones del ELN. El jueves, autoridades locales confirmaron el fallecimiento de una mujer embarazada que iba a dar a luz y del bebé que esperaba, después de notificar en días previos la muerte de una niña de menos de año y medio.
El ELN ha anunciado en un comunicado que, entre el 16 y el 21 de agosto, los guerrilleros facilitarán un «corredor humanitario» con vistas a «mitigar los efectos» de un paro que comenzó el día 11 y seguirá «hasta nueva orden». El objetivo es que pueda llegar la ayuda a la población, si bien la organización ha afirmado que todas las organizaciones deberán usar distintivos claros para evitar «accidentes» y ha aclarado que no habrá movimientos de noche.
Sin embargo, la guerrilla ha querido atribuir la «grave situacion humanitaria» en Chocó a la supuesta «colusión» entre las Fuerzas Armadas y el Clan del Golfo, que tendría como objetivo «destruir el tejido social y organizativo en los territorios» colombianos.
El Gobierno de Gustavo Petro se ha marcado como objetivo intentar lograr un acuerdo de paz con el ELN, pero los intentos siguen estancados entre acusaciones mutuas de desconfianza. El Ejecutivo plantó la semana pasada una nueva propuesta que sigue sin convencer a la guerrilla.
