El grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) se ha hecho en las últimas horas con el control de la localidad congoleña de Kamandi-Gite, ubicada en la costa occidental del lago Eduardo y en la región de Kivu Norte, en el este de República Democrática del Congo (RDC).
Según fuentes consultadas por la emisora Radio Okapi, la localidad ha caído durante la mañana en manos de los rebeldes que, fuertemente armados, han atacado las posiciones de los grupos de autodefensa Wazalendo que hasta ahora controlaban esta zona.
Tras los enfrentamientos, tal y como han indicado las mismas fuentes, miles de personas han huido para protegerse de la violencia, mientras que los grupos de autodefensa se han plegado a las colinas cercanas en lo que se ha interpretado como una probable preparación para un contraataque.
El M23 es un grupo rebelde formado principalmente por tutsis congoleños y que opera principalmente en la provincia de Kivu Norte. Tras un conflicto entre 2012 y 2013, RDC y el grupo firmaron en diciembre un acuerdo de paz. En dichos combates, el Ejército de RDC contó con apoyo de tropas de Naciones Unidas.
El grupo lanzó una nueva ofensiva en octubre de 2022, recrudecida a partir de noviembre, lo que ha provocado una crisis diplomática entre RDC y Ruanda por su papel en el conflicto. Expertos de la ONU apuntaron en diciembre a la existencia de «pruebas sustanciales» sobre una «intervención directa» del Ejército ruandés en el conflicto.
Igualmente, destacaron una colusión entre el Ejército congoleño y varios grupos armados, incluidas las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y los mai-mai, para combatir al M23, incluida la propuesta de grupos armados de «movilizar a 600 combatientes» para reforzar las filas de las Fuerzas Armadas.