Los precios de los carburantes han encadenado esta semana su cuarta subida consecutiva, dando continuidad a la espiral alcista en la que se encuentran prácticamente desde el arranque de 2024 y acumulan un encarecimiento de hasta el 2,6% en lo que va de año.
En concreto, el precio medio del litro de gasolina ha repuntado un 0,77% esta semana, para situarse en los 1,572 euros, su nivel más alto desde finales de noviembre, mientras que el diésel ha alcanzado los 1,527 euros el litro, tras un alza del 1%, para tocar máximos desde principios de diciembre, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea recogidos por Europa Press.
El precio medio de ambos carburantes inició 2024 registrando sus primeras subidas en tres meses, después de acumular un descenso tras otro desde finales de septiembre que les llevó a despedir el año pasado instalado en niveles mínimos del ejercicio tras sumar un abaratamiento de casi el 15%, en el caso de la gasolina, y de más del 13%, para el diésel.
No obstante, esta semana han tocado un nuevo máximo en lo que va de año. Desde esos mínimos en que finalizaron 2023, el precio medio del litro de gasolina acumula en prácticamente el mes y medio que va de 2024 una subida del 2,61%, mientras que el del diésel se ha incrementado un 2,27%.
LA GASOLINA, POR DEBAJO DE ANTES DE LA GUERRA DE UCRANIA.
A pesar de estos nuevos repuntes, el precio del litro de gasolina se mantiene todavía por debajo de los niveles en los que se situaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania -1,592 euros por litro-, que comenzó el 24 de febrero de 2022. En el caso del gasóleo sigue por encima del precio de entonces -1,479 euros por litro-.
Además, ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
EL DEPÓSITO, HASTA 5,6 EUROS MÁS BARATO.
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de gasolina tiene un precio de unos 86,46 euros, unos 3,4 euros menos que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a unos 89,87 euros, cuando ya no existía el descuento de 20 céntimos por litro que estuvo vigente en gran parte de 2022.
Para los vehículos de diésel, llenar un depósito medio (55 litros) supone un desembolso de 83,98 euros, unos 5,6 euros menos que en el mismo período de 2023, momento en el que el precio era de 89,59 euros.
Igualmente, con ésta, el diésel suma 51 semanas seguidas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual anterior a la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 hasta mediados de febrero de 2023, cuando se rompió la dinámica.
El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.
LOS PRECIOS EN ESPAÑA, MÁS BARATOS QUE LA MEDIA EUROPEA
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,720 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,768 euros.
En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,690 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,721 euros.