El proceso de mecanizado de acero inoxidable se realiza en un producto semielaborado de acero, con la fin de eliminar el material no deseado para que adquiera cierta forma y tamaño. El mecanizado permite una menor oxidación y corrosión del acero inoxidable, por esta razón, es tan importante para la industria metal mecánica.

Grumeber es una empresa de mecanizado y decoletaje, caracterizada por ofrecer a sus clientes un excelente servicio y calidad, cumpliendo con su misión de proporcionarles soluciones y aconsejarles durante todo el proceso.

El mecanizado de acero inoxidable

El acero inoxidable es un material compuesto principalmente de hierro, al cual se le añade una cantidad mínima de carbono. Sin embargo, dentro del sector del mecanizado, se puede encontrar un área dedicada exclusivamente a la manipulación del acero inoxidable para crear piezas destinadas al mercado industrial. Dicho material es uno de los más demandados en las empresas que están constantemente expuestas a la corrosión, ya que la evitan, impidiendo su oxidación.

Particularmente, el acero inoxidable es uno de los materiales más utilizados en el mecanizado, especialmente en tubos y bridas, gracias a sus incontables beneficios. Desde la resistencia a la corrosión, a las altas temperaturas y a la oxidación y su capacidad de ser reciclable, hasta tener mayor dureza y fuerza en comparación a otros metales, tener un buen acabado estético y su facilidad de limpieza y mantenimiento.

Estas características han convertido al acero inoxidable mecanizado en uno de los instrumentos más utilizados en gran variedad de fabricaciones, desde las plantas de tratamiento de agua y las máquinas para la elaboración de alimentos, hasta en las destinadas a aeronáutica o medicinas.

Propiedades del acero inoxidable

Hoy en día, el mecanizado del acero inoxidable es considerado uno de los más importantes materiales gracias a sus propiedades y los beneficios que aporta a las industrias y comercios que disponen de maquinarias con este tipo de material.

En primer lugar, el acero cuenta con un alto contenido en cromo, proporcionándole una gran resistencia a la corrosión del material para que pueda generar naturalmente una capa protectora al entrar en contacto con los factores del entorno, capa que tiene la capacidad de regenerarse cada vez que sufre daños.

Además, la gran mayoría de los productos fabricados a través del mecanizado de acero inoxidable están compuestos por aproximadamente un 80 % de chatarra de este material, es decir, son reciclables. Por otra parte, este material tiene la capacidad de soportar temperaturas extremas, tanto en frío como en calor, sin sufrir modificaciones o alteraciones en su forma, y presenta una notable resistencia al fuego en comparación con otros metales, sin producir humos tóxicos.

Por último, el acero inoxidable es de gran ductilidad, dureza y elasticidad, haciéndolo ideal para realizar cualquier pieza para comercios o industrias del sector, presentando incluso una amplia resistencia al desgaste del metal que lo conforma.