El fabricante de automóviles alemán, Mercedes-Benz, ha retirado 231.249 vehículos en el mercado chino debido a unas bombas de combustible defectuosas, según ha adelantado Bloomberg este viernes.
Los reguladores en China han señalado que estas bombas de combustible de los vehículos afectados podrían presentar «un riesgo de seguridad en caso de fallo».
Los automóviles con este defecto pertenecen a la división AMG del grupo, especializada en automóviles deportivos con altas prestaciones, así como a modelos SUV de los tipos GLE y GLC.