Minsait, filial de Indra, está desarrollando diferentes proyectos basados en inteligencia artificial (IA) para permitir a las compañías energéticas reducir el número de incidencias o detectar posibles riesgos, según ha informado la empresa en un comunicado.
La compañía ha subrayado que el sector de las ‘utilities’, asociado a servicios de carácter público con altos estándares de calidad, está impulsando el desarrollo de proyectos innovadores y, de forma particular, iniciativas relacionadas con el mundo de la inteligencia artificial.
«Con la monitorización de las operaciones, la IA permite a las compañías energéticas controlar uno de los aspectos más sensibles: la gestión de activos. Por ejemplo, para saber si hay chispazos en un centro de transformación o si sube la temperatura de determinados componentes. También para vigilar la seguridad perimetral de las instalaciones», ha detallado.
A ello se suma la posibilidad de utilizar la visión artificial para comprobar qué especies protegidas de aves atraviesan un campo eólico con el objetivo de reducir su siniestralidad o cuánto polvo se ha acumulado en las placas solares y cómo afecta a su rendimiento.
«Las necesidades de predecir la demanda, planificar la producción o prever el comportamiento de los precios de la energía explican la oportunidad de desarrollar proyectos basados en IA en las ‘utilities’, que conforman uno de los sectores más maduros a nivel predictivo. Y la capacidad predictiva es, precisamente, una de las fortalezas de la inteligencia artificial», ha agregado Minsait.
En este contexto, la compañía ha resaltado que la electrificación de la sociedad va a requerir una capacidad predictiva «cada vez más sofisticada para responder al incremento previsto de la demanda», impulsado por las ‘smart grids’ y el cada vez mayor peso de las renovables en el mix energético, incluida la producción autónoma de los hogares con capacidad para volcar el exceso de energía en la red.
Así, argumenta que la diversificación de las compañías energéticas está reconfigurando un mapa «más competitivo» dado que sectores como el de la automoción ejercen «mayor estímulo y aumentan la dependencia de la electricidad» entre la ciudadanía, por lo que surge la necesidad de asegurar la capacidad y la calidad de la distribución eléctrica.
Minsait también ha hecho hincapié en que la innovación en ‘utilities’ a través de la IA impacta, asimismo, en la ciudadanía y en los profesionales del sector.
«Por la automatización de procesos, que permite a sus profesionales dedicarse a tareas de mayor valor, y por las mejoras que introduce en el área de atención al cliente», ha explicado.
Sobre ello, ha ahondado en que la inteligencia artificial monitoriza y audita de forma automatizada las comunicaciones para que las compañías puedan trabajar en varias líneas con el fin de mejorar la experiencia y la personalización del servicio.
Todo ello contempla desde la reclamación de los clientes a la oferta de nuevos productos y servicios sabiendo cuáles son sus intereses.
En este contexto, el potencial predictivo de Minsait trabaja con la inteligencia artificial para que las ‘utilities’ puedan mejorar el mantenimiento predictivo de sus activos, aumentar su tiempo de operación y reducir los costes de mantenimiento.
Un ejemplo de ello es el proyecto de Minsait para predecir eventos meteorológicos que pueden afectar al suministro de una eléctrica.
«Gracias a la IA se comprobó que, además de anticiparse a fenómenos como las tormentas para preparar los equipos y evitar que afectaran a los centros de transformación, se podía explicar por qué en determinados momentos no se había podido cumplir con el SLA, acuerdo que compromete a las ‘utilities’ con la administración pública para responder a los niveles de calidad del servicio. Las compañías pueden demostrar así que no son responsables y, por tanto, no están sujetas a las sanciones asociadas al incumplimiento de estos contratos», ha indicado Minsait.
Otra línea de actividad es la mejora de la seguridad de los empleados gracias al reconocimiento de imagen, dado que Minsait permite monitorizar el uso de equipos de protección individual, la interacción peligrosa entre hombre y máquina y la detección de cualquier evento que pueda suponer un riesgo para las personas y la operación.
«El de las ‘utilities’ es un buen escenario para desarrollar dos tecnologías del futuro: el aprendizaje federado –ya que muchos de los dispositivos de estas compañías están descentralizados– y la computación cuántica. Esta resulta especialmente interesante para los mercados de energía, que requieren trabajar en tiempo real, manejar mucha información y procesar grandes cantidades de datos», ha valorado la filial de Indra.