En Wimbledon, el estilo en las gradas es casi tan protagonista como los partidos. Este año no defraudó: los VIPs brillaron con looks elegantes, pulcros y cargados de sofisticación.

Cynthia Erivo destacó en el Ralph Lauren Suite con un conjunto impecable de la firma, desde la cabeza a los pies, irradiando elegancia discreta sin perder impacto.

Nicole Kidman fue otra estrella que brilló con su traje blanco de chaqueta cruzada y pantalón a conjunto, complementado con sombrero Panamá y gafas oscuras, reafirmando la tradición del blanco en Wimbledon.

Daisy Edgar-Jones apostó por un look veraniego de líneas azuladas y saco de lona, añadiendo un toque juvenil y fresco a la elegancia habitual de las gradas.

Olivia Rodrigo y Louis Partridge rompieron esquemas con un vestido vichy rojo y trajes a tono, combinando tendencia y coordinación en pareja, lo que les situó como uno de los momentos más comentados del torneo.

Priyanka Chopra brilló con un vestido halter de Ralph Lauren, reminiscente del estilo preppy-estival tan característico del evento.

Numerosos rostros famosos desfilaron con estilo: Cate Blanchett con traje de lino azul, Rebel Wilson, Jessica Alba con su hija, Molly-Mae Hague, entre otros. La mayoría optó por prendas clásicas como trajes de lino, vestidos cóctel veraniegos, estampados florales, rayas y tonalidades claras o suaves, con guiños a los colores pastel y al blanco imperante en el torneo.

El enfoque predominante sigue siendo discreto y refinado, aunque no faltaron apuestas con personalidad. Ya sea con un traje sofisticado, un vestido estampado o una versión moderna del estilo preppie, Wimbledon conserva su estatus como la gran pasarela de moda veraniega británica.