Al menos seis personas han muerto y otras siete han resultado heridas en un bombardeo israelí contra el Centro de la Autoridad Sanitaria Islámica, afiliado al partido-milicia chií libanés Hezbolá, que está ubicado en el corazón de la capital de Líbano, Beirut, en el marco de los bombardeos israelíes que, según dicen, tienen como objetivo al grupo islamista.
El Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud de Líbano ha proporcionado el balance de víctimas, indicando que el ataque ha tenido lugar en el barrio de Al Bashura, después de que cuatro personas sucumbieran a sus heridas. Minutos antes, este organismo había informado del fallecimiento de dos personas, según informa la agencia de noticias libanesa NNA.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se han limitado a anunciar que están bombardeando la capital y han señalado que darán más detalles próximamente. La citada agencia de noticias ha informado, por su parte, que durante el ataque se ha utilizado fósforo blanco, que están prohibidas por el Derecho Internacional.
Estas víctimas se suman a los 46 muertos y 85 heridos registrados durante la jornada por bombardeos del Ejército de Israel en distintos puntos del país. En las últimas dos semanas, las acciones israelíes han dejado más de un millar de muertos, entre los que destaca el líder de Hezbolá, Hasán Nasralá. Desde entonces, más de un millón de libaneses y sirios han huido del país, la mayoría cruzando la frontera hacia Siria.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha denunciado por su parte que el balance de víctimas mortales e Líbano está aumentando, y los hospitales están desbordados por la afluencia de pacientes heridos. «El sistema sanitario, debilitado por las sucesivas crisis, se esfuerza por hacer frente a las inmensas necesidades», ha subrayado.