El grupo afirma que la última propuesta del Gobierno israelí no ayuda a cercar posturas y recalca que Israel «no es serio»
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha recalcado que la última contrapropuesta de Israel para intentar alcanzar un acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza no ayuda a acerca posturas y ha sostenido que «demuestra que la ocupación no es seria» en sus esfuerzos para lograr un pacto para la liberación de los secuestrados durante los ataques del 7 de octubre.
Osama Hamdan, un alto cargo del brazo político del grupo, ha sostenido que la propuesta presentada por Hamás tras el documento pactado en París por Qatar, Egipto, Estados Unidos y Egipto fue considerada como «positiva» por Doha y El Cairo, antes de agregar que «la respuesta de la ocupación no garantiza la libertad de movimiento de la población, el retorno de los desplazados, la retirada del Ejército de ocupación de Gaza y la apertura de pasos fronterizos para viajeros y heridos».
«Es más, la postura presentada por la ocupación para el intercambio de prisioneros confirma que no es serio sobre lograr un acuerdo de intercambio», ha dicho, antes de acusar al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de «mantener una política de evasión y procrastinación» y de «no estar interesado en lograr un acuerdo».
Así, ha manifestado que ‘Bibi’ «está intentando prolongar la guerra y ganar tiempo por motivos personales relacionados con su futuro político», según ha recogido el diario palestino ‘Filastin’, vinculado al grupo islamista.
Hamdan ha criticado además los planes de Israel para lanzar una ofensiva terrestre contra Rafá (sur), «un lugar abarrotado de desplazados», y ha sostenido que «sería un paso criminal motivado únicamente por los objetivos personales de Netanyahu, a través de los cuales busca salvarse y escapar de cualquier cese de la agresión a través del derramamiento de más y más sangre de civiles palestinos».
«Al declarar su intención de destruir lo que llamó ‘brigadas de Hamás en Rafá’, Netanyahu continúa su política de escapar a la realidad y mentir a su público. Habla como si su derrotado y roto Ejército hubiera tenido éxito a la hora de desmantelar a la resistencia en el resto de zonas en Gaza, cuando la verdad es que el mundo ve que sigue atrapado en Jan Yunis, con muertos y heridos cada día», ha reseñado.
De esta forma, ha incidido en que Hamás y otros grupos palestinos «siguen golpeando en la ciudad de Gaza y el norte de la Franja, mientras que el propio jefe del Ejército enemigo habla de la complejidad de la batalla de Jan Yunis». «Eso demuestra que la resistencia está en todas las zonas en las que ha entrado el Ejército de ocupación», ha zanjado.
Las palabras de Hamdan han llegado cerca de una semana después de que Hamás propusiera un plan para un posible alto el fuego que contempla un plan de tres etapas durante 135 días que llevaría al fin del conflicto y que incluiría la liberación de rehenes a cambio de la excarcelación de 1.500 prisioneros, el fin del cerco a la Franja de Gaza y un proceso de reconstrucción.
Sin embargo, Netanyahu expresó su oposición a los términos de la propuesta del grupo islamista palestino y sostuvo que una mayor «presión militar» sobre Hamás acercaría el objetivo de lograr la liberación de los rehenes. Tras ello, anunció planes para una ofensiva contra Rafá, en la frontera con Egipto.
El plan para atacar Rafá ha sido criticado por la comunidad internacional por la gran presencia de desplazados palestinos, que se dirigieron allí tras la primera fase de la guerra, en la que Israel invadió el norte y el centro del enclave, y tras su segunda fase, cuando sus tropas penetraron en Jan Yunis, en el sur.
Los ataques de Israel contra la Franja de Gaza comenzaron como respuesta al asalto de Hamás del 7 de octubre, que dejó 1.200 muertos y 240 heridos. Desde entonces, las autoridades palestinas han notificado la muerte de más de 28.300 muertos, a los que se suman 384 palestinos fallecidos en Cisjordania y en Jerusalén Este por las acciones de las fuerzas de seguridad y de colonos israelíes.