El primer ministro de Perú, Alberto Otárola, ha anunciado este lunes que el gobierno ha decidido declarar el estado de emergencia durante dos meses en las provincias de Trujillo y Pataz (norte) ante el aumento de la criminalidad.
En ambas provincias el Ejército y la Policía tomarán el control del orden interno de forma conjunta con las autoridades regionales y locales. El estado de emergencia incluye la suspensión de atención en locales comerciales, eventos sociales y espectáculos desde las 00.00 horas a las 4.00 horas.
«Esta medida busca controlar definitivamente los altos índices delincuenciales que afectan la paz y la tranquilidad», ha declarado según ha indicado el Consejo de Ministros andino a través de su perfil en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
Otárola ha precisado que «el crecimiento de la minería ilegal en Pataz es descontrolado». «Nos enfrentamos a 20 bandas organizadas. Por eso se ha tomado la decisión que las Fuerzas Armadas intervengan con el escrupuloso respeto de los derechos fundamentales», ha declarado el jefe del Gobierno.
Por otro lado, ha indicado que en 2023 hubo más de 30.000 delitos en Trujillo y que durante este año se ha producido «casi una muerte por día». «Existen una serie de bandas y organizaciones criminales que hacen daño a zonas densas y pobladas», ha indicado.
