El pleno del Ayuntamiento de Alicante, con los votos en contra de PP y Vox, ha tumbado una declaración institucional de Compromís en la que se pedía rechazar las declaraciones del obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, quien negó la existencia de terapias de conversión sexual.

La moción, que han respaldado PSPV y EU-Podem, también instaba a reafirmarse en cumplir con lo establecido en la Ley 23/2018, de 29 de noviembre, de igualdad de las personas LGTBI, normativa autonómica.

En concreto, el prelado manifestó en redes sociales que «lo que llaman terapias de conversión no existe, sino que son un constructo ideológico del marxismo para impedir a la Iglesia acompañar pastoralmente a las personas con inclinaciones homosexuales, ayudándoles a vivir la virtud de la castidad».

El portavoz de Compromís, Rafa Mas, ha defendido que «esta trama se está perpetrando en el seno de siete diócesis que, según denuncian asociaciones, miran para otro lado o dan el visto bueno» a estos «ataques y torturas homófobas que se hacen a adolescentes indefensos en centros educativos pertenecientes al arzobispado de Valencia, donde también se han detectado».

Mas ha instado al equipo de gobierno a que «ayude a la inspección educativa y al conseller de Educación para evitar que esto ocurra en Alicante». También ha recordado que el pleno de Les Corts Valencianes rechazó en octubre de 2024, con los votos de PP y Vox, la propuesta de Compromís para crear una comisión de investigación de estas presuntas prácticas.

En la misma línea, el portavoz de EU-Podem, Manolo Copé, ha incidido en que «estas prácticas, que pretenden modificar la orientación sexual o la identidad de género de las personas, han sido ampliamente condenadas por la comunidad científica y organismos internacionales, debido al carácter pseudocientífico que tienen y a los daños psicológicos que causan». Además, ha recordado que la ley autonómica «prohíbe expresamente este tipo de acciones y terapias».

«SANDECES»

Por su parte, Mario Ortolá, concejal de Vox, ha calificado de «sandeces» el contenido de la declaración institucional por expresiones como «campos de exterminio del obispado». «Tiene suerte de que no esté en el equipo jurídico del obispado», ha apostillado.

De esta forma, Ortolá ha afirmado que «Munilla, como bien dice, está hablando de adultos responsables, debidamente informados, creyentes libres de una fe que quieren un acompañamiento espiritual, por este o por otro cualquier motivo, y en ningún momento habla de medicación ni de cuestiones absurdas».

El edil de Vox ha argumentado que «lo más cerca que Compromís entiende por acompañamiento» es que la Conselleria de Educación –durante la etapa en la que era dirigida por Vicent Marzà– acudía a los colegios «a decir qué drogas duras podían usar los chavales menores para poder tener sexo seguro».

También se ha referido al acompañamiento que, según Ortolá, la Generalitat «denegó a la menor violada por el marido de Mónica Oltra». «Terapias hay de muchos tipos, contra cualquier tipo de vicio, incluidos los que tiene el señor Errejón», ha sentenciado el edil de Vox, al tiempo que enseñaba una imagen en la que el exportavoz de Sumar en el Congreso y Mas estaban a punto de darse un abrazo.

Posteriormente, el concejal socialista Emilio Ruiz ha reprochado a Ortolá «que no haya condenado las torturas contra las personas homosexuales» y ha aseverado que las declaraciones de Munilla «suponen un peligro real ante métodos que, además de ser ilegales, lejos de curar solo provocan dolor a quienes las sufren» porque «son torturas». «Sus comentarios no hacen más que sembrar odio y las consecuencias es que terminen matándonos como a Samuel», ha apuntado el edil del PSPV refiriéndose a la intervención de Vox.

«La señora Cuca Gamarra lleva al Congreso de los Diputados a ‘expertos’ que dicen que las personas trans están enfermas por problemas de salud mental y Ayuso a la psiquiatra Rojas Estapé con sus falsas evidencias científicas a hablar de la enfermedad de las personas homosexuales. ¿Creen que nosotros estamos enfermos y que yo lo estoy?», ha agregado Ruiz dirigiéndose a la bancada del PP.

«NO AFECTAN A ALICANTE»

Por parte del PP, la concejala Mari Carmen de España ha pedido a Mas que no haga a la corporación «perder el tiempo» al «traer al pleno un tema personal, en un intento de convertirse en víctima de no sé qué y compensar que ha sido reprobado varias veces» en plenos anteriores. «No es ejemplo de nada ni nadie. Espero que con lo vertido en el expositivo de la declaración vaya al juzgado y lo denuncie», ha remarcado.

De España ha subrayado que este tipo de prácticas «en nada afectan a la ciudad de Alicante» y ha defendido que «el PP no cuestiona el derecho de ningún colectivo a ser escuchado y respetado, pero sí rechaza el uso partidista y sectario de estos debates para imponer un pensamiento único y desviar la atención de los verdaderos problemas de la ciudad».

«Desde este grupo municipal defendemos la libertad individual, el respeto a todas las personas y la convivencia en una sociedad plural, pero también que el Ayuntamiento debe trabajar para todos los ciudadanos sin distinciones, sin imponer ideologías y sin usar las instituciones para fines personales o partidistas», ha sentenciado la concejala del PP.