Realia ha arrancado el proceso para absorber FCyC, sociedad que aglutina el negocio inmobiliario del grupo FCC, una operación que la compañía prevé concluir el próximo 2 de julio, cuando se registrará en el Registro Mercantil y la transacción tendrá efectos jurídicos, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
De esta forma, la sociedad absorberá a FCyC con la consiguiente disolución (sin liquidación) y extinción de ésta, que transmitirá todo su patrimonio a Realia, adquiriendo la sociedad por sucesión universal todos los derechos y obligaciones de FCyC, quedando sus operaciones desde enero de 2025 integradas en las cuentas de Realia.
En este sentido, los accionistas de FCyC se integrarán en el capital social de Realia a resultas de la fusión, recibiendo un número de acciones en proporción a su respectiva participación en el capital social de FCyC y sobre la base del tipo de canje que ha sido acordado para la fusión, esto es, 19,916 acciones de Realia de 0,24 euros de valor nominal cada una de ellas por cada acción de FCyC de 1 euro de valor nominal.
Para atender el canje, Realia realizará un aumento de capital de 167, 6 millones de euros de valor nominal mediante la emisión y puesta en circulación de 698 millones de nuevas acciones ordinarias de la sociedad, representativas del 86,1% de su capital social. El aumento de capital se realiza con una prima de emisión total de 536,5 millones de euros, siendo por tanto el importe efectivo total del mismo de 704,2 millones de euros.
El 90% de las acciones de Realia están en manos del mexicano Carlos Slim, principal propietario también de FCC, por lo que la mayor parte de los derechos de voto los tiene él a través de su sociedad Control Empresarial de Capitales.
MÁS VISIBILIDAD Y CAPITALIZACIÓN
El objetivo de la operación de dotar a Realia de una mejor visibilidad y reconocimiento de su marca, así como de una mayor capitalización y balance, al mismo tiempo que simplifica la estructura del negocio inmobiliario del grupo.
Además, según ha defendido la compañía, le dotará de una mayor capacidad para competir en el sector inmobiliario nacional e internacional, pudiendo beneficiarse asimismo de la diversificación de las actividades de negocio en el sector inmobiliario y de la diferente tipología de activos que pasarían a integrar el patrimonio de Realia.
El año pasado, Slim protagonizó otra reorganización de su negocio, que consistió en la agrupación de toda la actividad inmobiliaria y de cemento en una nueva empresa, Inmocemento –que salió a Bolsa aunque Slim también controla el 80% de su capital–. Antes, también lanzó una auto-OPA para adquirir un 7% adicional del capital de FCC.