La vicepresidenta del Govern catalán, Laura Vilagrá, ha garantizado que «el agua de boca no faltará» ante la posible declaración de emergencia por sequía en la zona de Barcelona y área metropolitana, aunque haya que recurrir a «medios a los que nunca se ha hecho en Cataluña», y ha descartado la posibilidad de cortar el suministro a infraestructuras hoteleras si la situación se prolonga en el tiempo.
Vilagrá, en una entrevista en RNE, ha explicado que las medidas excepcionales que haya que adoptar «se explicarán en su momento para hablar de certezas y no de especulaciones», pero ha reconocido la posibilidad de tener que recurrir a «compra de agua». «Si tiene que llegar (el agua) por medios que hasta ahora no se han hecho en Cataluña, pues tendremos que hacerlo», ha admitido Vilagrá, sin descartar recurrir al transporte en barco.
Respecto al impacto de la sequía en el turismo, ha garantizado que «no se cerrará ninguna actividad», sino que se «reducirá el agua que usan en estos momentos». En este sentido, ha asegurado que el propio sector ha propuesto medidas en algunos casos. «Queremos que todo el mundo sea muy responsable y gaste menos agua», ha indicado la vicepresidenta, que puso como ejemplo el caso de las piscinas que pueden regenerar el agua.
«Estamos preveyendo medidas compensatorias para valorar la pérdida de agua que puedan tener eventualmente, y tenemos encima de la mesas unas medidas que no supongan cerrar nada, que permitan reducir el uso del agua y que impacten lo mínimo posible», ha argumentado.
La vicepresidenta catalana ha cuestionado las críticas por la tardanza en la declaración de la emergencia por sequía y ha asegurado que el ejecutivo catalán lleva tomando «decisiones importantes» desde hace dos años que han permitido «alargar la situación» que, según ha admitido, en estos momentos «es muy crítica en Barcelona y parte de Girona».
«Tenemos que tomar medidas más contundentes y la ciudadanía podrá llegar hasta 200 litros por persona y día que, en muchos municipios lo cumplen a rajatabla», ha indicado la dirigente catalana. Lo que ha rechaado también es que, en el cado de incumplirse estos límites que no ha descartado endurecer, puedan producirse cortes de suministro. «Lo que estamos haciendo es sancionar a aquellos ayuntamientos, industrias y las personas que no cumplen», ha argumentado. Asimismo, ha recordado que se está procediendo ya a rebajar «la presión del agua y controlar mucho más».
En cuanto a la posibilidad de pedir ayuda al Gobierno central, Vilagrá ha reconocido necesitar esa ayuda para la financiación de infraestructuras. «Lo estamos haciendo con la vicepresidenta porque esto se escapa ya de lo que es normal, esto es absolutamente excepcional», ha añadido la vicepresidenta, quien tampoco ha rechazado pedir, como ha hecho Andalucía, que Bruselas active el Fondo de Solidaridad de la UE ante la catástrofe por sequía.