Vox quiere saber por qué el presidente de la Generalitar, Pere Aragonés, ha sido invitado a participar en el inicio de la XXVII Hispano-Francesa que se ha reunido este jueves en Barcelona, recordando además que su propio partido, ERC, ha participado en las protestas que se han convocado entorno a la cita.
En una serie de preguntas parlamentarias registradas en el Congreso, Vox subraya que se trata de una cumbre internacional de alto nivel entre dos países y pregunta cuál es el papel de Aragonés en ella.
«¿Qué rol desempeña el presidente regional del Ejecutivo catalán durante la celebración de la cumbre bilateral?», ahondan los de Santiago Abascal, que además quieren saber en qué otras ocasiones se ha invitado a presidentes autonómicos a citas internacionales.
Aragonés ha estado presente en el saludo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y también la recepción al francés, Emmanuel Macron; junto a otras autoridades como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; la delegada del Gobierno en Cataluña, María Eugenia Gay; y la presidenta de la Diputación, Nuria Marín.
Sin embargo, el presidente catalán se ha marchado tras estos saludos y no se ha quedado al momento en el que han sonado los himnos español y francés; a diferencia del resto de autoridades, que sí han asistido a este acto y han visto cómo Sánchez y Macron han pasado revista a las tropas.
En cualquier caso, ni Aragonés ni ninguna otra autoridad ajena a los Gobiernos de España y Francia han participado en la Cumbre celebrada en el Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Cataluña, en la que primero ha habido reuniones bilaterales entre los presidentes y los ministros de cada materia y después un plenario en el que han sellado un Tratado de Amistad y Cooperación.
El Palacio de la Moncloa ya explicó este miércoles que el trato ofrecido a Aragonés ha sido el mismo que se ha reservado a otros presidentes autonómicos y responsables locales en cumbres de este tipo con otros países en otras ciudades, subrayando que este se limita a saludar a la delegación de turno, en este caso la francesa, pero en ningún caso intervienen en la reunión propiamente dicha.
Además, el propio Pedro Sánchez ha reconocido después que le hubiera gustado que el presidente catalán se hubiera quedado al resto de la ceremonia de inicio de la Cumbre pero le ha agradecido que haya estado presente en los saludos, a diferencia de otros mandatarios autonómicos que no lo hicieron, según ha apuntado.
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